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Trichet cree que... ¿cuestión de fe? |
El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, ha enviado hoy un mensaje de optimismo a los mercados al afirmar que ve cerca un punto de inflexión en la actual crisis ya que existen indicios que apuntan a recuperación económica.
Según el máximo representante del regulador monetario europeo, «identificamos algunos elementos expansivos. Contamos con una serie de factores que sugieren que nos aproximamos al momento en el que se puede producir una recuperación". Con ese mensaje Trichet ha tratado hoy de inyectar algo de optimismo en lo mercados.
Durante su intervención en una conferencia económica organizada por el Banco Internacional de Pagos (BIS) el presidente del BCE ha apuntado a un punto de inflexión en la crisis a corto plazo, no obstante, Trichet también ha reconocido que para que esto tenga lugar es necesaria una recuperación en la confianza de los consumidores.
Para el responsable del banco central este requisito es fundamental para lograr una recuperación del crecimiento. Además, Trichet ha recordado que la mayoría de los analistas pronostican una contracción del crecimiento este año en las economías avanzadas y un estancamiento en el conjunto de la economía, mientras que la recuperación se espera que llegue en 2010.
"Consideramos que actualmente existe a nivel global, y particularmente en la esfera financiera, una infravaloración de los efectos expansivos del precio del petróleo y de las materias primas, así como del impacto de las medidas fiscales", ha apuntado el presidente del BCE.
Trichet ha explicado que los mercados subestiman actualmente los efectos positivos que tendrán a medio plazo las medidas de alivio puestas en marcha por los gobiernos, así como el impacto que tendrá la política monetaria de los bancos centrales de todo el mundo.
Respecto a la amenaza que supone la deflación, el presidente del regulador monetario considera que no supone una amenaza demasiado probable a nivel mundial. Por esta razón Trichet ha reiterado la importancia de que los bancos centrales sigan dejando ancladas las expectativas de inflación.
(continue)

Etiquetas: conocimiento, medios, memoria, monopolios, multitud, politica.
De este modo, Trichet indicó que los expertos del BCE han revisado a la baja sus previsiones de crecimiento del PIB en la zona euro para 2009 por el agravamiento de la recesión y ahora esperan una contracción de entre el 3,2% y el 2,2%, mientras que para 2010, cuando se prevé una "recuperación gradual" de la economía, las previsiones sitúan un rango que oscila entre una contracción del 0,7% y un crecimiento del 0,7%.
Asimismo, desde el punto de vista de la inflación, las previsiones de los expertos del BCE prevén un rango de entre el 0,1% y el 0,7% este año y de entre el 0,6% y el 1,4% en 2010.
De este modo, el máximo responsable de política monetaria de la zona euro afirmó que las expectativas de inflación se mantendrán "muy por debajo" del objetivo de estabilidad de precios en 2009 y 2010.
Por otro lado, Trichet anunció que el consejo de gobierno del BCE decidió mantener un tipo fijo de adjudicación, así como el suministro ilimitado de liquidez para todas sus operaciones de refinanciación durante todo el tiempo que sea necesario, incluso más allá de finales de 2009.
El Eurogrupo (ministros de Finanzas de la zona del euro) y la Comisión Europea admitieron ayer que por el momento no hay señales de que la economía europea haya tocado fondo y vaticinaron que, al contrario de lo estimado hasta ahora, la recuperación no se iniciará hasta 2010.
A su llegada al encuentro del Ecofin (Consejo de Ministros de Finanzas de la Unión Europea), Solbes aludió hoy a la opinión ligeramente más favorable del Banco Central Europeo -que ve ciertos indicios de recuperación-, basada principalmente en la evolución de la liquidez. "Hay previsiones de todo tipo dependiendo de las variables que uno tome de partida", señaló el titular de Economía y Hacienda.
Insistió en que, en sus últimas proyecciones macroeconómicas, el Gobierno intentó ser "lo más realista posible" y opinó que todavía "es un poco prematuro" hacer cambios a esas cifras.
El vicepresidente también se refirió al retroceso en el nivel de convergencia de la economía española con la media de la Unión Europea (UE) y explicó que es "un tema puntual", debido a la caída del crecimiento -menor que la de sus socios, recalcó- combinada con el mantenimiento de los flujos de inmigración y el aumento de la población activa.
Según los datos difundidos ayer por la Fundación de Cajas de Ahorros (Funcas), el índice de convergencia de la economía española en relación a la media comunitaria -medido en términos de renta regional por habitante en paridad de poder de compra- pasó en 2008 del 100,74 al 99,6. Según estos cálculos, once comunidades autónomas retrocedieron en su convergencia con la UE. Solbes incidió en que se trata de un "problema de números", un "ajuste temporal, al que no hay que dar mayor importancia".
Por último, al ser preguntado sobre la posibilidad de que el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, decida relevarle de su puesto en un hipotético cambio de Gobierno, el vicepresidente se limitó a responder: "pregúntele al señor Zapatero".
Otro mensaje del presidente de los banqueros en el Congreso de los Diputados: España es uno de los países más endeudados del mundo y por lo tanto el objetivo prioritario es reducir ese endeudamiento. Eso sí, en su opinión, este proceso de desapalancamiento debe hacerse de forma gradual y no brusca porque de lo contrario podría llevarse por delante a entidades financiera.
En su opinión, las causas de la crisis económica española no tienen que ver sólo con lo que ha ocurrido en EEUU, sino que también, hay razones internas. En particular en lo relacionado con las enormes necesidades de financiación que ha tenido la economía española.
La banca "arrimará el hombro"
Martín, aseguró hoy que la banca "arrimará el hombro" para salir de la crisis e insistió en que no se ha cerrado el grifo del crédito "porque seríamos las primeras víctimas si lo hiciéramos". "Estamos dispuestos a desplegar con inteligencia y tesón nuestras capacidades y no escatimaremos los esfuerzos que nos corresponden", subrayó Martín durante su comparecencia en la Comisión de Economía del Congreso para dar explicaciones sobre la restricción crediticia.
En cualquier caso, sí destacó que en España las familias y las empresas padecen la "enfermedad" del sobreendeudamiento, que sólo puede "curarse" reduciendo su nivel de deuda, y recordó que la concesión de crédito está sujeta a tres condicionantes: calidad, liquidez y solvencia.
El presidente de la patronal bancaria insistió en la solidez, eficiencia y competitividad del sistema bancario español, pero advirtió de que, para que lo siga siendo, deben llevarse a cabo las reformas "necesarias" tanto de la economía como del sistema bancario.
“Identificamos algunos elementos en la economía global [...], que son expansivos”, dijo el responsable de política monetaria de la eurozona en el seno de una conferencia del G-10 organizada por el Banco Internacional de Pagos (BIS) en Basilea (Suiza).
Estas declaraciones se producen tan sólo una semana después de que el BCE empeorase sus previsiones sobre el crecimiento económico para este año, al augurar una contracción de entre el 2,2% y el 3,2%, y para el siguiente, en el que el PIB podría presentar un crecimiento negativo del 0,7%, o positivo, también del 0,7%. Pero ayer indicó que “contamos con una serie de factores que sugieren que nos aproximamos al momento en el que se puede producir una recuperación”, añadió.
Recuperar la confianza
No obstante, Trichet aseguró que es fundamental que vuelva la confianza para que la actividad se reactive.
Por ello, añadió que hay muchos elementos positivos que los inversores y los mercados financieros están desestimando, tales como la caída de los precios de las materias primas, los paquetes de estímulo fiscal, los recortes de tipos de interés y los acuerdos de los gobiernos de no dejar caer a las instituciones financieras.
En el caso del BCE, la semana pasada dejó el precio del dinero en su nivel más bajo de la historia, en el 1,5%. Desde octubre, los ha recortado en 275 puntos básicos.
Por otro lado, EEUU ha presentado planes por valor de 787.000 millones de dólares para reactivar la economía y China ha anunciado un paquete de medidas de 580.000 millones. En Europa, la cifra ronda los 200.000 millones de euros, recoge Bloomberg.
“La mayoría de los expertos prevé un crecimiento negativo para los países industrializados, muy cercano a cero a nivel global, y empezar a levantarse en 2010”, apostilló Trichet.
Sin embargo, según los expertos, pese a que valoran de forma positiva que se lance este mensaje al mercado, consideran algo aventurado que se vea tan cerca la luz al final del túnel.
“¿El punto de Inflexión? La semana pasada publicaron una previsión de crecimiento medio del 2,7% para este año y del 0% para 2010.
En algún momento se tocará fondo, pero con los mercados de renta variable y de crédito como están, es bastante arriesgado intentar decir cuándo. Luego estaría por ver a qué velocidad nos recuperamos”, apunta Antonio Villarroya, estratega de Merrill Lynch.
Jüergen Michels, economista de Citi, espera una estabilización de la economía global en la segunda mitad de 2009, “cuando los paquetes de estímulo fiscal y el monetary easing (medidas para hacer llegar la liquidez al sistema) sostengan la actividad”.
Aunque matiza que “la perspectiva sobre la economía a nivel global, y para la zona euro en particular, permanecen frágiles”.
Informe del Ecofin
El mensaje de Trichet contrasta con las previsiones que mantiene el grupo del Ecofin.
Financial Times publica en su edición de hoy que las posibilidades de que la economía de la Unión Europea crezca el próximo año son “altamente inciertas”, según un documento al que ha tenido acceso el rotativo británico, que será aprobado hoy por los ministros de finanzas de la UE.
Pese a que no se ofrecen previsiones concretas, se indica que el desempleo aumentará de forma brusca a finales de año y en 2010, y que los países de la eurozona tendrán que enfrentarse a persistentes diferencias en la competitividad de sus negocios.
El documento pinta un panorama más oscuro que las perspectivas publicadas por la Comisión Europea en enero, que auguraba una recuperación gradual de la economía en 2010 (contracción del 1,8% del PIB para este año y un crecimiento del 0,5% para 2010).
El escrito, que se debatirá en la reunión que mantendrán los jefes de Estado y de gobierno la próxima semana, incluye, a su vez, que el FMI “requiere un incremento sustancial de sus recursos para asistir a los países afectados particularmente por la crisis financiera”.
La entidad monetaria europea recuerda que desde el 8 de octubre de 2008 ha reducido el precio del dinero en 2,75 puntos porcentuales, hasta el 1,5%. La semana pasada el BCE bajó la tasa rectora en medio punto porcentual.
El BCE hizo hincapié en que "las tasas de inflación han disminuido significativamente y que permanecerán previsiblemente bien por debajo del 2% en 2009 y 2010".
Esta perspectiva para la inflación se debe "a la caída en los precios de las materias primas y la disminución de los precios y de las presiones sobre los costes".
A su vez ello refleja un severo empeoramiento de la actividad económica, que "se recuperará gradualmente a lo largo de 2010", según el banco europeo.
Los datos disponibles y los indicadores sugieren que la economía mundial se ha debilitado sustancialmente en los últimos meses, lo que refleja el impacto de las turbulencias del mercado financiero.
Economías emergentes
Además, este debilitamiento económico ha afectado también a las economías emergentes. EL BCE destacó que el comercio mundial ha caído fuertemente, al mismo tiempo que se ha producido un pronunciado descenso de la demanda interna en la zona del euro.
El banco europeo redujo la semana pasada notablemente sus pronósticos de crecimiento e inflación para este año y 2010 respecto a las previsiones dadas a conocer el pasado diciembre.
Ahora, el BCE prevé que el Producto Interior Bruto (PIB) de los países que comparten el euro se contraerá entre un 3,2 y un 2,2% en 2009 (una media del 2,7%).
Para 2010 el BCE es un poco más optimista y calcula que el PIB del área euro se estancará al situarse entre menos 0,7 y 0,7%.
Esta perspectiva para la inflación se debe "a la caída en los precios de las materias primas y la disminución de los precios y de las presiones sobre los costes". A su vez ello refleja un severo empeoramiento de la actividad económica, que "se recuperará gradualmente a lo largo de 2010", según el banco europeo. Los datos disponibles y los indicadores sugieren que la economía mundial se ha debilitado sustancialmente en los últimos meses, lo que refleja el impacto de las turbulencias del mercado financiero.
Además, este debilitamiento económico ha afectado también a las economías emergentes. El BCE destacó que el comercio mundial ha caído fuertemente, al mismo tiempo que se ha producido un pronunciado descenso de la demanda interna en la zona del euro. El banco europeo redujo la semana pasada notablemente sus pronósticos de crecimiento e inflación para este año y 2010 respecto a las previsiones dadas a conocer el pasado diciembre.
Ahora, el BCE prevé que el Producto Interior Bruto (PIB) de los países que comparten el euro se contraerá entre un 3,2 y un 2,2% en 2009 (una media del 2,7%). Para 2010, el BCE es un poco más optimista y calcula que el PIB del área euro se estancará al situarse entre menos 0,7 y 0,7%.
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