Wonder News: Servicio de Inteligencia del Pentágono

La SIP, Servicio de Inteligencia del Pentágono, o como se hacen llamar “Sociedad Interamericana de Prensa”, es un conjunto o Club de propietarios de medios; la gran mayoría proveniente de los USA, y que naricean a los mas pequeños que actúan en Latinoamérica realizando el trabajo sucio en beneplácito del pentágono.

Hoy en día nadie en su sano juicio debe darle credibilidad a esta membresía de la ultraderecha radical. Todos los dueños de los diarios norteamericanos que dirigen a la SIP, así como sus versiones latinoamericanas son agentes del imperio. Nadie escapa de los designios de la casa blanca y de las oficinas de inteligencia de los EEUU. Los directivos de este Club de Amigos de la derecha rancia, proviene de los USA, solo dos personajes oscuros son suramericanos, el Colombiano Enrique Santos Calderón, y el Chileno Julio E Muñoz; Santos como todos saben hermano del Vicepresidente de Colombia, y dueño del Tiempo de Bogota. Solo con estos curriculum debemos ir pensando cuales son los intereses de estos mafiosos del periodismo.

En Venezuela, la SIP ha tratado de socavar la credibilidad del Proceso Revolucionario. La SIP a través de sus agentes en Venezuela, es decir los dueños de El Nacional, El Universal, Globo visión, Televen, RCTV,Int. Cadena 1BC, Cadena Unión Radio y otros pasquines regionales. Se han dado a la tarea de tratar de crear al unísono una matriz de opinión que haga implosionar la Revolución Bolivariana. Todos estos dueños de los medios en Venezuela, junto con sus operadores (Periodistas que siguen el “Juego” desestabilizador para ganar algunos “verdes” a través de la embajada de los USA, y ser invitados a eventos en donde la SIP ejecuta estrategias para desestabilizar gobiernos progresistas), Son una especie de Brazo periodístico del gobierno estadounidense en nuestro país. No es extraño ver a dueños y periodistas ir constantemente a la embajada de los USA, para recibir directrices de cómo manejar eventos publicitarios u ollas periodísticas en contra el pueblo de Venezuela.

Nuestra lucha eficiente, en todos los terrenos de las comunicaciones es la única herramienta para contrarrestar el poder mediático de la SIP. Los Medios del Estado, Los Medios Comunitarios deben estar entrelazados, y en constante vigilia, así como en recorridos permanentes en todo el territorio nacional. Todo esto debe hacerse de inmediato. La verdad no puede tener de dueño a mafiosos y lacayos. La Verdad pertenece al pueblo socialista. Es ahora o Nunca.

Publicado por Pause

contiene 3 comentarios.
Etiquetas: conocimiento, medios, mentiras, monopolios, multitud, politica.

Anónimo

► miércoles, 08 octubre, 2008

El asunto es sencillo de explicar y de entender. Los medios privados (los locales y por supuesto los trasnacionales también) le declararon la guerra al Presidente Chávez desde un inicio, cuando vieron y pudieron constatar que -a diferencia de lo que ocurría antes de 1999- no podrían los señorones de la “mass media” criolla ni nombrarle ministros, ni tener cupos o espacios de poder propios y no ganados (en el gobierno), ni impulsar medidas de interés particular o sectorial, y menos si tales intereses van en contravía del interés colectivo.

Ahí mismo comenzó la guerra de ellos contra el gobierno bolivariano y no al revés. Acabada la partidocracia, los medios (prensa y tv privadas) asumieron el rol político-partidista en pleno apogeo aun del neoliberalismo. Historia documentada.

La pregunta que me haría -hipotéticamente hablando- es: ¿cómo actuarían frente a los medios españoles el señor zapatero o el mismísimo rey de España si aquel famoso coronel tejero, el que en 1981 hizo un intento de golpe de estado, hubiese estado acompañado de un decidido apalancamiento de los medios de comunicación social españoles de la época?...¿los aplaudirían y acompañarían en sus actuaciones y en sus festejos?. No creo. ¿Entonces?.

Sigo: ¿llamarían zapatero y el rey a la concordia y la reflexión -como lo hizo en su oportunidad el Presidente Chávez una vez recuperada su libertad en el 2002, y en un sincero intento que resultó vano-, si ambos hubiesen estado sometidos a la presión golpista y magnicida?; o hubiesen sido ellos castizamente más implacables. Si creo. ¿Entonces?.

¿No pensarían -quienes hoy gobiernan España- que tales medios (socios en la SIP), más que representar un interés genuino por la libertad de expresión utilizan su poderío mediático para incursionar en la política sucia y desestabilizadora contra las instituciones establecidas?; y todo para proteger sus intereses (que objetivamente colidan con los de las mayorías). ¿Creen que Santos -nuevo SIPresidente-, se preocupa o defiende los intereses de los colombianos de a pie?. No creo. ¿Entonces?.

Y volviendo a la historia hipotética: ¿Qué pensaría el PSOE si los medios españoles para justificar la movida del cnel. tejero en 1981 hubiesen mantenido en esa época (o desde entonces hasta ahora), una sistemática campaña contra el partido socialista español por no representar éste los intereses de los grandes propietarios y elites y representar los genuinos intereses del pueblo español?. Claro, mucho ha llovido desde lo que era en su origen aquel partido obrero de pablo iglesias, con lo que es hoy dicha corporación.

Y sigo preguntándome ¿Cómo se comportaría zapatero, y también su majestad, contra unos medios de comunicación politizados y teledirigidos por una derecha reaccionaria y neoconservadora dispuesta en España (o donde sea) a frenar los cambios a como dé lugar, incluyendo la desaparición física del jefe de estado, como objetivo último para tratar de revertir un proceso de cambios? (cambios que ya soplan en toda Nuestra América). ¿Asistirían a sus sesiones de gala?. Lo dudo.

Qué harían zapatero y el rey, de verdad, en ese caso (de resultar ellos y la democracia española las víctimas de estos poderes fácticos trasnacionalizados que tan bien se encuentran representados por la SIP): ¿retratarse y tomarse fotos y brindar con champagne con semejantes verdugos?. Lo dudo. ¿Entonces?.

Seguramente harían lo mismo que acá: dejarlos que chillen y griten sus mentiras y falsedades al mundo, pero metiéndole el ojo para impedir sus desmanes, pues todo tiene un límite, hasta la tolerancia. Por eso, que la SIP no pida flores ni cariñitos, y que no nos pidan a los ciudadanos y ciudadanas que santifiquemos como víctimas a estos sinvergüenzas mercenarios mediáticos. Ubíquense. Bolívar Vive.

Anónimo

► miércoles, 08 octubre, 2008

Anónimo

► miércoles, 08 octubre, 2008

Los mismos que no dudaron en derogar la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y destituir a todos los poderes constitucionales, en abril de 2002, y los mismos que hoy impulsan con toda fuerza la realización de un nuevo golpe de Estado y los planes de magnicidio contra el jefe de Estado venezolano

A continuación el comunicado oficial emitido por el Ministerio de Comunicación e Información, en torno a la posición asumida contra Venezuela, en la reunión de la Sociedad Interamericana de Prensa en Madrid:

El cartel de los grandes propietarios de empresas periodísticas del continente lee una vez más, ahora desde Madrid, el mismo panfleto impregnado de mentiras que repite sobre Venezuela desde 1999.

Los integrantes de la delegación que dice representar a Venezuela, que se presentan como supuestos defensores de la democracia, son en realidad los conspiradores permanentes contra la democracia venezolana, los responsables de la ejecución sistemática de planes de terrorismo mediático contra Venezuela, los mismos que no dudaron en derogar la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y destituir a todos los poderes constitucionales, en abril de 2002, y los mismos que hoy impulsan con toda fuerza la realización de un nuevo golpe de Estado y los planes de magnicidio contra el jefe de Estado venezolano.

Las mentiras constantemente repetidas por Miguel Henrique Otero, Marcel Granier, Alberto Federico Ravell y David Natera, chocan contra la evidencia que tienen hoy todos los pueblos del mundo de que Venezuela goza de una absoluta libertad de expresión, practicada por miles de medios de comunicación privados, alternativos y comunitarios en todo el territorio venezolano.

Lo que realmente lamentan es haber perdido el privilegio de ser propietarios de la "libertad de expresión" y el fracaso permanente de sus planes conspirativos.

Por si fuera poco, recientemente personalidades y organizaciones políticas de la oposición venezolana, han denunciado que estos personajes impusieron candidaturas para las próximas elecciones regionales del 23 de noviembre, amenazando con silenciar a los opositores que no apoyaran a los candidatos que sus medios imponían.

Los capos del cartel de la SIP en Venezuela también utilizan la reunión de Madrid para generar presiones internacionales, dirigidas a impedir la investigación que lleva adelante la Asamblea Nacional venezolana sobre los recientes planes de golpe de Estado y magnicidio, en la que evidencias evaluadas por los diputados venezolanos muestran la participación de estos personajes en los planes de conspiración que sus medios silencian o banalizan.

Los venezolanos no podíamos esperar menos de la SIP. Sabemos que ese cónclave –desde su nacimiento- opera como agencia de propaganda de la Casa Blanca y al servicio de las oligarquías locales en nuestros países. Por ello, entendemos que el actual presidente del cartel, Earl Maucker, (que heredó el cargo de quien fuera censor de la dictadura uruguaya) agreda con especial énfasis a los gobiernos revolucionarios de Bolivia, Ecuador y Venezuela, es decir, aquellos países que han decidido romper con el esquema de dominación del imperialismo y que con heroísmo construyen un futuro de justicia y equidad para sus pueblos.

América Latina vive hoy un momento de empuje y victoria de sus pueblos. Es un momento de luz que guía a las organizaciones populares en su lucha por alcanzar verdaderas democracias y una libertad de expresión real, la libertad de expresión de los millones de ciudadanos que recuperan su voz frente a los empresarios que la habían confiscado y que hoy se reúnen en Madrid para tratar, infructuosamente, de imponer desde allí su silencio a los pueblos.