Una de las regiones más pobres de Japón está recibiendo un aliciente de una nueva fuente: la próspera economía de Rusia.
La prefectura de Shimane reposa sobre la adormilada y relativamente aislada costa del Mar de Japón, al lado opuesto de ajetreadas ciudades como Tokio y Osaka. Su población está disminuyendo y carece de grandes industrias.
Aun así, Hamada, el principal puerto de Shimane, se está convirtiendo rápidamente en un centro para el comercio para la zona del extremo oriente de Rusia. El valor de las exportaciones que partieron de allí se triplicó en los tres años hasta 2007. En julio, Hamada se convirtió en el primer puerto de Japón con una ruta directa de barcos cargueros hacia el puerto ruso de Vladivostok, en el Pacífico.
Este año, Light International Business Corp., un concesionario de autos usados en Hamada, planea exportar unos 23.000 vehículos a Rusia, casi el doble que en 2006. "Esta es una oportunidad en mil años que nuestra comunidad debería aprovechar", dice Katsuhiro Takahashi, director general de la empresa. "Rusia ha surgido como un mercado práctico y sustancial para nosotros".
Los crecientes lazos comerciales con Japón son el más reciente capítulo de una difícil relación entre los vecinos. Hacia el final de la Segunda Guerra Mundial, la Unión Soviética invadió cuatro islas japonesas que Rusia no ha devuelto.
Sin embargo cuando Moscú rechazó las importaciones de Occidente durante la Guerra Fría, Japón se convirtió en uno de los mayores socios comerciales de la Unión Soviética.
Tras el fin de la Guerra Fría, Europa dominó el comercio de Rusia. Ahora, el intercambio Rusia-Japón está creciendo otra vez, en gran parte gracias a las importaciones de autos a través de su costa oriental. En 2006, Japón representaba el 5,6% de las importaciones rusas. El valor de las exportaciones japonesas a Rusia creció 49% en el primer semestre del año frente al mismo lapso de 2007, a casi US$8.000 millones. En el mismo período, las exportaciones totales de Japón crecieron sólo 3,8%.
Algunas de estas exportaciones van a los nuevos ricos de la Rusia europea, atraída por los productos japoneses más sofisticados. Hace poco, en Globus Gourmet, una sofisticada cadena de supermercados en Moscú, las manzanas japonesas estaban a la venta por unos US$9 el medio kilo. Los lujosos autos Lexus de Toyota Motor Co. también son populares, así como los televisores de pantalla plana.
En el oriente de Rusia, una región rica en recursos, el alza en los precios del petróleo ha disparado el costo de los proyectos energéticos. Esto ha generado una nueva legión de consumidores de clase media, algunos de los cuales están viajando a la parte nororiental de Japón.
"La proximidad geográfica es un factor muy importante", señala Andrey Belov, un profesor de economía en la universidad japonesa Fukui Prefectural, ubicada en la costa del Mar de Japón. "Es particularmente cierto ahora porque el transporte se está desarrollando rápidamente".
Publicado por
Pause
contiene 0
comentarios.
Etiquetas:
conocimiento, memoria, monopolios, multitud, politica.
Publicar un comentario
Wonder News
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.