El ministro francés de Trabajo, Xavier Bertrand, ha anunciado ante la Comisión nacional de Negociación colectiva un aumento del 0,9% del Salario Mínimo Interprofesional de Competencia (SMIC) el 1 de julio, con lo que pasará a ser de 1.037,53 euros netos al mes para una jornada laboral de 35 horas (1.321,02 euros brutos). El Ministerio recuerda en un comunicado que el índice de precios al consumo (IPC) ha aumentado un 3,2% en un año.
Según un estudio publicado por el Ministerio de Economía, el salario mensual base del conjunto de trabajadores franceses ha aumentado un 2,6% en 2007, con diferencia según los sectores. El 1 de julio de 2007, la subida fue del 2,1% y en esta fecha cobraban el SMIC el 12,3% de los trabajadores franceses de los cuales la mitad trabajaba a tiempo parcial, según los datos del Instituto nacional de Estadísticas y Estudios Económicos.
Indexado sobre la inflacion, el SMIC se revaloriza anualmente el 1 de julio pero el Código de trabajo prevé que si la inflación supera el 2% desde la última revisión, se puede elevar a lo largo del año, como fue el caso del pasado mayo. El aumento anunciado hoy es para la Confederación General del Trabajo (CGT) 'escandaloso' porque sólo representa ocho céntimos a la hora.
Por otro lado, el Gobierno ha lanzado una campaña informativa para dar a conocer las medidas puestas en marcha para aumentar el poder adquisitivo de los franceses apoyada en unos 1.630 spots bajo el eslógan 'Estáis impacientes. Nosotros también'.
El mensaje se podrá escuchar durante tres semanas en la televisión y será visible en internet y la prensa escrita, pero no en radio por razones presupuestarias.
El Ejecutivo se ha centrado en la exoneración fiscal de las horas extraordinarias, del trabajo de los estudiantes, la disminución a la mitad de la fianza para alquilar una vivienda o la exoneración de los intereses del préstamo de la compra de la primera vivienda. La campaña, que ha costado 4,33 millones de euros, ha sido encargada a la agencia Young & Rubicam.
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jueves, 03 julio, 2008
Dinamarca
Mientras, el nerviosismo crecía en la zona euro antes de un esperado aumento en las tasas del Banco Central Europeo, después que el presidente francés, Nicolas Sarkozy, dijera que tal medida podría golpear el crecimiento y no hacer nada para reducir la alta tasa de inflación generada por los altos precios del crudo.
En tanto, varios países dentro y fuera de la zona euro que tuvieron al auge inmobiliario como principal conductor de sus economías en los últimos años publicaron una serie de malas noticias. Entre ellos, Irlanda, España y Gran Bretaña, además de Dinamarca.
"Aquellos que pecaron con el sector inmobiliario son castigados por el sector inmobiliario," dijo Gilles Moec, economista para Bank of America en Londres.
El Producto Interno Bruto en Dinamarca se redujo en un 0,6 por ciento en el primer trimestre de este año en comparación con el último del 2007, según datos publicados por la oficina nacional de estadísticas.
La noticia llegó luego de la confirmación esta semana de que Irlanda está también al borde de una recesión tras la crisis inmobiliaria, de que España tampoco está en muy buen estado y ante las crecientes señales de que los precios de las casas en Gran Bretaña están cada vez más bajos.
"Las noticias siguen empeorando para la economía británica," dijo Michael Saunders de Citigroup tras la publicación de una serie de datos negativos para Gran Bretaña.
"Ayer vimos una caída en la confianza del consumidor y las aprobaciones de hipotecas. Hoy vemos una nueva baja en los precios de las casas, además de las señales de que la actividad manufacturera se encamina a una recesión," agregó.
España
La crisis ya golpea de lleno el mercado laboral español. Si en los últimos meses, la actividad económica del país se mostraba incapacitada para crear nuevos puestos de trabajo, los datos de paro y afiliación del pasado mes de junio reflejan sin paliativos la creciente destrucción neta de empleo que padece España.
Con los datos del mercado laboral relativos a junio, en donde el desempleo se ha disparado y la creación de empleo ha entrado ya en tasa negativa, el ya de por sí débil crecimiento del PIB (menor al 0,3 por ciento en el segundo trimestre) avanza la llegada de la temida recesión económica (dos trimestres consecutivos con crecimiento negativo) a corto plazo.
El número de parados registrados en las oficinas del Instituto Nacional de Empleo (INEM) aumentó en 36.849 personas en junio, la primera subida en este mes desde 1996, año en el que comenzó la actual serie histórica. Se trata de un incremento del 1,56 por ciento respecto a mayo, con lo que la cifra total de desempleados alcanza las 2.390.424 personas, según informa el Ministerio de Trabajo e Inmigración.
Sin embargo, la comparación de toda la serie histórica disponible muestra que el incremento de junio de 2008 (1,56 por ciento) es el más alto desde 1979 (2,06 por ciento). Es decir, más elevado, incluso, que la subida del desempleo experimentada en junio de 1993 (1,42 por ciento), durante la última crisis económica sufrida en España.
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