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Afganistán: La guerra de Zapatero |
Al menos nueve soldados estadounidenses y "decenas" de insurgentes talibán han muerto en una batalla registrada en la provincia de Kunar, en el este de Afganistán, según informaron hoy fuentes de la OTAN bajo el anonimato. "La batalla se prolongó durante todo el día", precisó la fuente en relación al enfrentamiento, que tuvo lugar cerca de la frontera con Pakistán.
Ocho de los nueve soldados fallecidos se encontraban bajo el mando de la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad en Afganistán (ISAF), mientras que el noveno fallecido pertenecía a las fuerzas de la coalición liderada por EEUU.
Etiquetas: conocimiento, medios, memoria, mentiras, politica, violencia.
Anónimo
Las fuerzas de la OTAN y el ejército afgano están bajo constantes ataques tanto allí como en la provincia de Kunar, cerca de la frontera con Pakistán, así como en la provincia de Nuristán.
Todavía no se conocen detalles sobre las circunstancias en que murieron los soldados estadounidenses, pero según el corresponsal de la BBC en Kabul, Martin Patience, es la mayor pérdida en un día desde que las fuerzas de la coalición iniciaron sus operaciones en Afganistán.
Difícil situación
Según las autoridades locales, el atacante sería miembro del Talibán y habría hecho detonar una motocicleta cargada de explosivos con la que chocó a un vehículo policial en un bazar del distrito Deh Rawud en Uruzgán.
Mientras tanto, también este domingo, un atentado suicida en la provincia de Uruzgan, en el sur de Afganistán, dejó un saldo de más de 20 muertos, la mayoría de ellos mujeres y niños.
A pesar de que las fuerzas militares extranjeras ascienden a unos 70.000 efectivos, la situación en el país se torna cada vez más difícil. Unos 800 civiles murieron en lo que va del año, según cifras del gobierno y de Naciones Unidas.
Tras la invasión a fines de 2001 que expulsó al régimen Talibán del poder, las milicias lograron reagruparse hace dos años y se enfrentan casi a diario a las fuerzas de la OTAN en las regiones tribales cercanas a la frontera con Pakistán.
Efecto en Irak
La difiícil situación en Afganistán podría tener un efecto inmediato en la estrategia de Estados Unidos en Irak, según publica este domingo el diario The New York Times.
Según ese medio, Washington estaría estudiando retirar en septiembre próximo parte de sus tropas de combate de Irak.
"El deseo de mover rápidamente a los hombres refleja la visión de muchos en el Pentágono de reducir la tensión en los militares, pero también tener más tropas para Afganistán", dice el artículo.
Entre mayo y junio pasado, Estados Unidos y sus aliados perdieron más efectivos en Afganistán que en Irak, una tendencia que continúa, según lo demostraron los hechos de este domingo.
Todavía no se conocen detalles sobre las circunstancias en que murieron los soldados estadounidenses, pero según el corresponsal de la BBC en Kabul, Martin Patience, es la mayor pérdida en un día desde que las fuerzas de la coalición iniciaron sus operaciones en Afganistán.
Difícil situación
Según las autoridades locales, el atacante sería miembro del Talibán y habría hecho detonar una motocicleta cargada de explosivos con la que chocó a un vehículo policial en un bazar del distrito Deh Rawud en Uruzgán.
Mientras tanto, también este domingo, un atentado suicida en la provincia de Uruzgan, en el sur de Afganistán, dejó un saldo de más de 20 muertos, la mayoría de ellos mujeres y niños.
A pesar de que las fuerzas militares extranjeras ascienden a unos 70.000 efectivos, la situación en el país se torna cada vez más difícil. Unos 800 civiles murieron en lo que va del año, según cifras del gobierno y de Naciones Unidas.
Tras la invasión a fines de 2001 que expulsó al régimen Talibán del poder, las milicias lograron reagruparse hace dos años y se enfrentan casi a diario a las fuerzas de la OTAN en las regiones tribales cercanas a la frontera con Pakistán.
Efecto en Irak
La difiícil situación en Afganistán podría tener un efecto inmediato en la estrategia de Estados Unidos en Irak, según publica este domingo el diario The New York Times.
Según ese medio, Washington estaría estudiando retirar en septiembre próximo parte de sus tropas de combate de Irak.
"El deseo de mover rápidamente a los hombres refleja la visión de muchos en el Pentágono de reducir la tensión en los militares, pero también tener más tropas para Afganistán", dice el artículo.
Entre mayo y junio pasado, Estados Unidos y sus aliados perdieron más efectivos en Afganistán que en Irak, una tendencia que continúa, según lo demostraron los hechos de este domingo.
Anónimo
La guerra de Afganistán no es para liberar el país de los talibanes, sino para controlar los recursos económicos y estratégicos de este país. Las tropas invasoras han conducido el territorio a la peor situación humanitaria posible y no dudan en cometer las peores violaciones de derechos humanos, llegando a las masacres sistemáticas de población civil, para lograr sus fines. Todo lo que nos decían sobre los fines de esta guerra ha resultado ser mentira. Las mujeres siguen llevando el burka, el cultivo del opio florece como nunca, los señores de la guerra -ahora al servicio de EE UU- campan por sus respetos sometiendo a la población a sus arbitrios, y el país están en una situación de guerra permanente con una población que sufre sus efectos: desplazamientos, masacres, bombardeos indiscriminados, utilización de municiones radioactivas y armas prohibidas etc. etc.
Denunciamos desde aquí la complicidad de los medios de comunicación europeos, entre ellos los españoles, que no hacen más que tratar de ocultar la naturaleza de esta misión bélica invasora hurtando una gran parte de la información, o mostrándola en espacios marginales de sus soportes periodísticos cuando no es posible el ocultamiento. Esta política informativa, digna de los tiempos de Goebbles, se complementa con los amplios y destacados reportajes propagandísticos publicados tratando de mostrar un perfil de las tropas invasoras heroico además de supuestamente bienhechor y humanitario.
Los medios españoles rizan el rizo del descaro cuando ofrecen la información de estas masacres de civiles por parte de las tropas invasoras de Afganistán tratando de distinguir la actuación de los contingentes de EE UU que operan en el país sin control alguno por parte de la ONU y ni siquiera de la OTAN, del resto de contingentes invasores -entre ellos el español- que sí se encuadran en esas actuaciones militares falsamente “legitimadas” por resoluciones de estos organismos internacionales. Como si toda la operación de intervención militar en aquel país no obedeciera a una misma lógica y planificación, y como si los diferentes contingentes no estuvieran repartiéndose funciones (más sucias o limpias, según cómo se quiere quedar de cara a la opinión pública de cada país) y territorios dentro de una misma unidad de acción. Recordemos que estos mismos medios de comunicación que tan fino hilan para tratar de eximir de responsabilidad a las tropas españolas con respecto a los crímenes cometidos por tropas invasoras que se vienen conociendo, cuando abordan otros temas -el de qué colectivos pertenecen o no al entramado de ETA por ejemplo- emplean raseros diametralmente opuestos.
Denunciamos desde aquí la complicidad de los medios de comunicación europeos, entre ellos los españoles, que no hacen más que tratar de ocultar la naturaleza de esta misión bélica invasora hurtando una gran parte de la información, o mostrándola en espacios marginales de sus soportes periodísticos cuando no es posible el ocultamiento. Esta política informativa, digna de los tiempos de Goebbles, se complementa con los amplios y destacados reportajes propagandísticos publicados tratando de mostrar un perfil de las tropas invasoras heroico además de supuestamente bienhechor y humanitario.
Los medios españoles rizan el rizo del descaro cuando ofrecen la información de estas masacres de civiles por parte de las tropas invasoras de Afganistán tratando de distinguir la actuación de los contingentes de EE UU que operan en el país sin control alguno por parte de la ONU y ni siquiera de la OTAN, del resto de contingentes invasores -entre ellos el español- que sí se encuadran en esas actuaciones militares falsamente “legitimadas” por resoluciones de estos organismos internacionales. Como si toda la operación de intervención militar en aquel país no obedeciera a una misma lógica y planificación, y como si los diferentes contingentes no estuvieran repartiéndose funciones (más sucias o limpias, según cómo se quiere quedar de cara a la opinión pública de cada país) y territorios dentro de una misma unidad de acción. Recordemos que estos mismos medios de comunicación que tan fino hilan para tratar de eximir de responsabilidad a las tropas españolas con respecto a los crímenes cometidos por tropas invasoras que se vienen conociendo, cuando abordan otros temas -el de qué colectivos pertenecen o no al entramado de ETA por ejemplo- emplean raseros diametralmente opuestos.
Anónimo
"No hemos hecho más que poner otro ladrillo en el edificio necesario para mejorar las condiciones de seguridad de los afganos", ha afirmado ante los periodistas el mando del contingente, el coronel Pedro Pérez García, a la llegada al del avión comercial en el que se han trasladado los últimos militares que permanecían al oeste del país asiático.
Ha trasladado además su sensación de haber cumplido el objetivo que se fijó el contingente, que "se notara el antes y el después", sobre el que ha afirmado que cree que "la situación de la población afgana ha mejorado" tras la estancia en el país de los 425 soldados que se integraron desde el mes de marzo en la fuerza internacional creada en 2001 por la ONU para estabilizar el país.
Preguntado por la relación mantenida con la población autóctona, el mando ha dicho que ha sido "francamente buena" teniendo en cuenta que hay zonas en las que la pobreza es realmente extrema, por lo que cualquier ayuda que repartieran "se agradecía mucho".
Antes del regreso de la tercera y última de las rotaciones previstas para el regreso de las tropas, que empezaron el 6 de julio, el pasado 13 de julio tuvo lugar la Transferencia de Autoridad por parte del grupo de la Brigada de la Legión a la nueva agrupación española que permanecerá en el país. Esta la integran la Brigada Paracaidista, la unidad de Helicópteros de las FAMET y las Agrupaciones de Apoyo Logístico 21 de Sevilla y 22 de Granada.
Ha trasladado además su sensación de haber cumplido el objetivo que se fijó el contingente, que "se notara el antes y el después", sobre el que ha afirmado que cree que "la situación de la población afgana ha mejorado" tras la estancia en el país de los 425 soldados que se integraron desde el mes de marzo en la fuerza internacional creada en 2001 por la ONU para estabilizar el país.
Preguntado por la relación mantenida con la población autóctona, el mando ha dicho que ha sido "francamente buena" teniendo en cuenta que hay zonas en las que la pobreza es realmente extrema, por lo que cualquier ayuda que repartieran "se agradecía mucho".
Antes del regreso de la tercera y última de las rotaciones previstas para el regreso de las tropas, que empezaron el 6 de julio, el pasado 13 de julio tuvo lugar la Transferencia de Autoridad por parte del grupo de la Brigada de la Legión a la nueva agrupación española que permanecerá en el país. Esta la integran la Brigada Paracaidista, la unidad de Helicópteros de las FAMET y las Agrupaciones de Apoyo Logístico 21 de Sevilla y 22 de Granada.
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