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Poco talante, menos talento |
No han necesitado muchas horas de huelga (apenas tres días) para que tanto el ministro del Interior (que fuera portavoz del gobierno en la época de los GAL, no nos olvidemos), Alfredo Pérez Rubalcaba y el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero enseñaran los dientes y mentaran a las llamadas fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.
Mano dura, amenazan con la porra de los 25.000 policías y guardias civiles, dicen que los piquetes son ilegales, hablan de "tolerancia cero".
Como será el tema que los medios de desinformación masiva más derechistas están encantados con esta pareja y sólo le reprochan la tardanza, dicen que tendrían que haber actuado antes.
Zapatero (Chikilicuatre)
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, pidió hoy el fin del paro del transporte y que los convocantes se sumen al acuerdo que el Ministerio de Fomento ha suscrito con la mayoría del sector, y advirtió de "tolerancia cero" y de un aumento de los efectivos policiales desplegados en caso de que persistan los actos de violencia y coacción.
"El Gobierno garantizará la libre circulación de aquellos transportistas que quieren trabajar, que son la mayoría", aseguró Rodríguez Zapatero, durante la rueda de prensa que ofreció junto con el presidente de México, Felipe Calderón.
El jefe del Ejecutivo aseguró además que el Gobierno "ha hecho lo que tenía que hacer en cada momento" durante este conflicto, con el Ministerio de Fomento negociando y el Ministerio del Interior "dando respaldo al despliegue de 25.000 efectivos planificando y previsto". Según indicó, tenían "desde la semana pasada" orden de actuar ante los posibles problemas que podía ocasionar el paro.
Así, el presidente advirtió a las organizaciones convocantes de que han emprendido "un camino que no va a ninguna parte" con su reivindicación de fijar una tarifa mínima para los servicios de transporte y con los actos de coacción. "Quemando camiones no se logra nada más que hacer daño a la gente y a los bienes, sobre todo cuando se sabe que hay un Gobierno con capacidad de diálogo y sensible", subrayó.
"El Gobierno es consciente de lo que representa el aumento del precio del petróleo para el sector y de las dificultades que tiene, y ha hecho un esfuerzo muy importante dialogando, que es como se arreglan las cosas", garantizó.
Por ello, hizo una llamada a la "responsabilidad" a los convocantes para que se sumen al acuerdo cerrado por Fomento y el resto del sector sobre un conjunto de 54 medidas de apoyo para afrontar el alza del combustible.
En este sentido, Rodríguez Zapatero constató que "progresivamente a lo largo del día de hoy se ha ido recuperando la normalidad" en el suministro y en el transporte, si bien indicó que los efectivos policiales ya han escoltado casi 7.000 camiones y han abordado a más de un millar de piquetes desde el inicio del paro, con el despliegue de unos 25.000 efectivos de Policía y Guardia Civil establecido "desde el primer día".
Este dispositivo sigue activo, según el presidente, que advirtió de que el "Gobierno va a tener tolerancia cero con cualquier acto de coacción o violencia". Además, reiteró que si persistiera, "aunque fuera en tono menor", la actitud de protesta y coacción, "el Gobierno empleará más medidos si fuera necesario".
"Podemos tener plena confianza en cómo trabaja nuestra Guardia Civil y nuestra Policía, lo tiene muy acreditado, sabe cuando hay que actual y cómo actuar", subrayó para después "reconocer su meritoria tarea" ante la presencia "muy elevada de camiones y piquetes" en toda España durante las pasadas jornadas.
Rubalcaba (El Verdugo)
El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha advirtido este mediodía que el Gobierno empleará "máxima firmeza" contra quienes "perjudiquen la vida de los ciudadanos" por el paro de transportes que sigue parte del sector.
Rubalcaba cifró en 25.100 los agentes de las Fuerzas de Seguridad destinados a este cometido, que, añadió, efectuarán detenciones e impondrán sanciones y multas.
"Tienen la instrucción de actuar con la máxima firmeza dentro de la Ley", dijo Rubalcaba sobre los agentes de Seguridad.
En este sentido, el ministro enmarcó las 34 detenciones que se acababan de producir en la A-1, poco antes de su comparecencia ante los medios, a las que hay que sumar las 17 de ayer.
Dijo que "no es constitucional" perjudicar la rutina de los ciudadanos ni alterar el orden público, en referencia a los piquetes, que calificó de "ilegales".
Preguntado sobre cuál es el criterio para que los agentes intervengan, ya que hoy se ha multiplicado el número de detenidos en relación a los dos primeros días de la huelga, Rubalcaba reiteró que el de garantizar los derechos de los ciudadanos.
Multas de carácter individual
Sobre las multas dijo que serán de carácter individual y que afectarán, por ejemplo, a los camioneros estacionados ilegalmente en la carretera, que se agravarán si esas detenciones suponen "un peligro" para el resto de conductores.
El titular de Interior lanzó un mensaje a los ciudadanos, garantizándoles que podrán circular libremente, acceder a los servicios públicos esenciales y abastecerse de los productos básicos, así como de combustible.
Dijo que para ello están los 18.500 guardias civiles y los 6.600 policías nacionales.
El ministro habló de las gasolineras de la Comunidad de Madrid, de las que dijo, citando fuentes de la patronal, que el 80% no tienen problemas de abastecimiento.
Reconoció "algún problema" en Cataluña la noche del lunes, pero añadió que ya está solucionado, al tiempo que enmarcó el posible desabastecimiento en algunos puntos en la afluencia masiva de consumidores a las estaciones de servicio.
"La gente se ha asustado", dijo Rubalcaba, quien también dijo comprender la actitud de los consumidores.
Escoltas
A los distribuidores, les reiteró que contarán con escolta policial si tienen dificultades para trasladar sus productos.
Así, dijo que ya se viene realizando protección de transportes de alimentos, combustible y productos sanitarios.
Así, conminó a las empresas que tengan problemas para mover sus productos a que contacten con delegaciones y subdelegaciones del Gobierno para solicitar escolta policial, de las que se han realizado 2.953 hasta las 8 de la mañana de hoy.
Rubalcaba reconoció que "quizá" el Ministerio del Interior ha cometido "un error" en no informar públicamente de la actuación que estaban llevando las Fuerzas de Seguridad, lo que provocó "cierta sensación de que no se hacía nada".
El operativo actual es "suficiente"
Preguntado por si el Gobierno se está planteando la participación de las Fuerzas Armadas en el operativo especial, el ministro del Interior cree que el operativo actual es "suficiente".
"Veamos cómo se desarrollan los acontecimientos", ha dicho Rubalcaba, que ha advertido no obstante de que su ministerio estará alerta por si fracasan las negociaciones entre los transportistas y el Ministerio de Fomento.
"Las medidas les benefician y deben entender que lo que quiere la ciudadanía y la gran mayoría de los transportistas es la normalidad de todos", apuntó cerrando así cualquier margen de nueva negociación con los convocantes.

Etiquetas: conocimiento, medios, mentiras, multitud, politica, violencia.
A la gente desde luego, desgraciadamente, la engañan y manipulan, pero todo tiene unos límites. Y cuando las evidencias se manifiestan día a día en la vida cotidiana de cada ciudadan@ en un sentido muy diferente de lo que nos cuentan desde el gobierno y todo su entramado mediático, ocurre lo inevitable, que la realidad acaba por imponerse.
Y la realidad que estamos viviendo, en lo económico, en lo social y en lo político, exige importantes transformaciones que en la medida que no se aborden, solo irán generando más movilización y mas lucha.
Este gobierno parece evidente que tiene una nula voluntad de abordar esas transformaciones y por tanto habrá que imponerlas desde la calle.
Es curioso comprobar como los portavoces políticos y mediáticos del gobierno, ante el inicio de la huelga de transportes, responden que las reivindicaciones de los transportistas son inasumibles, no porque técnica o económicamente sean inviables, no, dicen que son inasumibles porque son ''ilegales'' y que la Unión Europea no lo permitiría.
Ante las reivindicaciones de marineros y campesinos la respuesta fue similar.
Ante las reivindicaciones políticas del Pueblo Vasco y del Pueblo Catalán para el avance en sus derechos, la respuesta también fue semejante, es decir que esas propuestas eran ''ilegales'' y no cabían en la Constitución española.
En los próximos meses, veremos como la respuesta a las reivindicaciones de otros sectores que se van a ir incorporando progresivamente a las luchas, será de características similares, es decir que no pueden ser atendidas, porque son ilegales o anticonstitucionales.
Nosotros-as ante esta situación absolutamente Kafkiana, nos preguntamos: ¿Si la legalidad vigente, la que emana de la Constitución española y la que emana de la Unión Europea, choca con las soluciones a los problemas que realmente sufren los Pueblos y clases trabajadoras en el Estado Español?
¿Si la legalidad vigente es el corsé que impide avanzar en la conquista de derechos políticos y sociales?.
La respuesta parece como muy obvia, y es que sólo nos queda un camino, el de la exigencia del cambio de la legalidad vigente, porque parece claro que las leyes han de servir para ayudar a resolver los problemas, han de estar al servicio del ''COMÚN'' , y no al revés, es decir que sea el ''COMÚN'', que sea el Pueblo el que esté al servicio de las leyes.
Una legislación que tiene esas características, que sólo sirve para defender los obscuros intereses de las minorías privilegiadas sera legal pero no lícita y simple y llanamente hay que cambiarla.
En su famoso ¿Qué hacer?, Lenin explicaba como la lucha sectorial por sí misma no se convertía en lucha política, que esa impronta había que aportársela desde las organizaciones revolucionarias, pero también reflexionaba cómo esa labor se veía facilitada en las condiciones de Autocracia que se vivían en la Rusia Zarista.
En nuestra opinión esa reflexión, en su esencia, es de aplicación al Regimen Monárquico-Borbónico en el Estado Español, es por ello que las movilizaciones sociales aquí, acaban casi siempre teniendo una lectura y un contenido político.
Como decíamos en el título de este artículo, las movilizaciones sociales condicionadas por la actual crisis económica no han hecho mas que empezar. Es tarea de los-as revolucionarios-as, participar en ellas, impulsarlas, extenderlas, pero también y muy fundamentalmente politizarlas.
El Sistema con las respuestas que esta dando, la verdad es que nos lo está poniendo fácil.
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